lunes, 10 de febrero de 2014

CAPÍTULOS I y II ® © @




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¿Quién sé reveló a Moisés?


“Que Dios sea Trinidad es lo que debemos probar, no sólo a los creyentes, fundados en la autoridad de la escritura, sino incluso, si ello es posible, a los de inteligencia despierta, apoyados en argumentos de razón?”., Cf., San Agustín (356-430 ) ‘Di Trinitate’, XV. 1,1; I. 2,4.

“En efecto, participar en la vida de Dios, Trinidad de Amor, es alegría completa (cf. 1 Juan 1, 4), Y comunicar la alegría que se produce en el encuentro con la Persona de Cristo, Palabra de Dios presente en medio de nosotros, es un don y una tarea imprescindible para la Iglesia. En un mundo que considera con frecuencia a Dios como algo superfluo o extraño, confesamos con Pedro que sólo Él tiene “palabras de vida eterna” ( cf. Juan 6, 68 ). No hay prioridad más grande que esta: abrir de nuevo al hombre de hoy el acceso a Dios, al Dios que habla y nos comunica su amor para que tengamos vida abundante Cf. Juan 10, 10 )”., Cfr. “Exhortación Apostólica Postsinodal, Verbum Domini, S.s. Benedicto XVI, Introducción, Pág., 7, # 2, Septiembre ( 2010 ).Ver Imagen.



CONTINUA 









"Al cabo de los siete días, el Señor se dirigió a mí, y me dijo: A ti, hombre, yo te he puesto de centinela para el pueblo de Israel. Cuando yo te comunique algún mensaje, deberás anunciárselo de mi parte, para que estén advertidos"., Cf. Profeta Ezequiel 2: 16.

"Yo Soy Padre de todos vosotros, de todo el género humano y todos tenéis el derecho de recibir mis Enseñanzas de aquellos a los cuales he escogido para transmitir mi Voluntad. ¿Qué hubieran hecho, en la antigüedad, mis hijos, si no hubiera Yo hablado por medio de mis Profetas?"., Cf. Mensaje de Amor de Dios Padre a sus Hijos, el 16 de Junio de 1999, Tomo 3, Página 39.

Según varios estudiosos no se puede concretar muy bien, sin temeridad, cuál de las Tres Personas de la Divina Trinidad se apareció y revelo la Toráh a Moisés, asistió a Adán y Eva, a los patriarcas y profetas del Antiguo Testamento permanentemente. Además, aseguran que el Antiguo Testamento es una mitología y que lo que dijo Dios fue falso y lo escrito también es falso. 

Esta última sentencia se la han aplicado también al Nuevo Testamento. Expresando abiertamente que Jesús de Nazareth no fue ni el primero ni el único ser sobre la tierra que murió y resucitó al tercer día, ni el primero en multiplicar los panes y los peces, ni el único hijo nacido de una virgen. Antes que él, en Egipto, el dios egipcio Osiris gozo de idénticos privilegios. Es la teoría de Llogari Pujol (nacido en Taradell, España, 1939) – teólogo catalán e investigador de antiguos textos egipcios, ex sacerdote. Estudió teología en la Universidad de Estrasburg.

Atrajo el interés público por su libro (en coautoría con Claude-Brigitte Carcenac) “Jesús, 3000 años antes de Cristo. Un faraón llamado Jesús“(1987). En esta obra controvertida y en contravía con la tradición,  demuestra que la vida del Jesucristo que se describe en los Evangelios es una réplica de escritos egipcios (algunos de una antigüedad de 3.000 años) que se refieren a dioses y a faraones divinizados. Como prueba presenta, entre otras cosas, los paralelismos siguientes, entre otros muchos:     
  
El Faraón en el antiguo Egipto era considerado como el hijo de Dios, él era un hombre, y también un dios, como Jesús. Su madre proclamaba la concepción divina, como se afirmó de Jesús acerca de su concepción. El Faraón era el mediador entre el hombre y Dios, y al morir resucitaba y ascendía al cielo.

La oración del Padre Nuestro de Jesús es, según el autor, casi idéntica a la “Oración del ciego”, que estaría en un texto egipcio del año 1000 a.C.

En un texto egipcio (en demótico) del año 550 a. C., “La historia de Satmi”, se dice, según Llogari Pujol: “la sombra de Dios se presentó ante Mahitusket y le dijo: “Tendrás un hijo, que se llamará Si-Osiris. Al traducir, “Mahitusket” significa llena eres de gracia y “Si-Osiris” significa hijo de Osiris, es decir, el hijo de Dios. El esposo de Mahitusket. “Satmi” significa “el que obedece a Dios”: Lo mismo que hizo luego José, llamado “el justo” en el Evangelio.

En la mitología egipcia, Seth quiere matar al niño llamado Horus. Por lo que su madre, Isis, se escapa con él. Al igual que la Sagrada Familia que huye a Egipto.

Los egipcios creían que la mirra, el incienso y el oro eran las emanaciones del dios Ra, el oro era su cuerpo, su olor el incienso y la mirra su semen.

En “La historia de Satmi”, Si-Osiris, a los 12 años, discute de tú a tú con los sabios del Templo. Como Jesús hizo a la misma edad según se cuenta en el Evangelio.

En la tumba egipcia de Paheri (1.500 a.C.) se escenifica una fiesta, que en la que el faraón convierte el agua en vino. En esta pintura hay seis jarras, el mismo número que en el milagro que hizo Jesús. Los teólogos aún se preguntan por qué seis. Llogari Pujol sostiene que los evangelistas copiaron la historia de Egipto.

El dios Sobek, como cuentan los “Textos de las pirámides”, 3.000 años antes de Cristo, multiplicó los panes y los peces y los dio a la gente en la orilla del lago Faiun. Luego, caminó sobre las aguas de este lago. (En las pinturas góticas que representan la pesca milagrosa por los apóstoles se puede discernir que estos peces son de un tipo especial, tilapias nilóticas, que viven sólo en el Nilo).

Osiris, el dios del trigo, al morir todos los años, les permitía a los egipcios alimentarse de su cuerpo (el pan). En los “Textos de las pirámides” también se le llama “el señor del vino”. Osiris también da de beber a Isis el cáliz de su sangre, para que ella lo recuerde después de su muerte.

Pero en nuestro caso, creemos que si se puede concretar de cual de las Tres Personas de la Divina Trinidad se apareció y revelo a todos. Ella misma, se lo expresa a Santa Brígida de Suecia: 

“Hay dos caminos hacia el interior de estos tesoros, pese a que antes solo había uno. En el cruce, o sea, a la entrada de los dos caminos, hay un hombre que, gritando a tres hombres que toman el segundo camino, les dice: ¡Escuchad, escuchad lo que tengo que deciros! Si no queréis escuchar, al menos emplead vuestros ojos para ver que lo que digo es cierto. Si no queréis usar ni vuestros oídos ni vuestros ojos, al menos usad vuestras manos para tocar y daros cuenta de que no hablo en falso’. Entonces, el primero de ellos dice: ‘Vamos a entender y ver si lo que dice es cierto’. El segundo hombre dice: ‘Todo lo que dice es falso’. El Tercero dice: ‘Se que todo lo que dice es cierto, pero no me importa’…  Yo Soy Dios, el Creador de todas las cosas, nada se ha creado sin mí. Yo establecí los testamentos nuevo y antiguo, ambos salieron de mi boca y no hay falsedad en ellos porque Yo Soy la verdad. Por ello, aquellos que digan que Yo soy falso y que las Sagradas Escrituras son falsas, nunca verán mi rostro porque su conciencia les dice que Yo Soy Dios, pues todo ocurre según mi deseo y disposición”, Cfr. El Libro de las Revelaciones Celestiales, Santa Brígida de Suecia, Libro I, Capítulo 15, Págs., 21 y 23. 

Para otros no se puede determinar, a no ser que los textos lo indiquen exactamente, si fue el Padre Celestial, el Hijo (Yesúah) o el Espíritu Santo  (El Paráclito); o si unas veces se apareció el Padre (Abba), otras el Hijo (El Mesías) y algunas el Espíritu Santo (Rúj); o, finalmente, si se manifestó el Dios único a todos, en la historia de la salvación en los instantes más oportunos. 

“Yo soy el Creador y Señor de todas las cosas. Yo hice el mundo y el mundo me evita. Oigo en el mundo un ruido parecido al de las abejas que acumulan miel sobre la tierra. Cuando la abeja está volando y comienza a aterrizar emite un zumbido. Ahora oigo como una voz que zumba en el mundo y que dice: ‗ ¡No me importa!‘. De hecho, la humanidad no presta atención ni se preocupa de lo que hice por amor, aconsejándoles mediante los profetas, por mi propia predicación y mediante mi sufrimiento por ellos. No les importa lo que hice en mi enojo, al corregir a los malvados y desobedientes. Sólo ven que son mortales y se sienten inseguros sobre la muerte, pero no les preocupa. Oyen y ven la justicia que infligí al Faraón y a Sodoma, debido al pecado, y la que aplico sobre otros reyes y princesas, permitiéndola diariamente mediante la espada y otras desgracias, pero parece que están ciegos ante todo esto. Igual que las abejas, vuelan por donde quieren. De hecho, a veces vuelan como si se disparasen hacia lo alto, cuando se exaltan a sí mismos por el orgullo, pero enseguida caen de nuevo rápidamente cuando vuelven a su lujuria y a su gula. Reúnen miel de la tierra para sí mismos, fatigándose y acumulando por si apremia la necesidad del cuerpo, pero no para el alma. Buscan lo terreno más que el honor eterno. Convierten lo pasajero en un auto castigo, lo inútil en tormento eterno. Sin embargo, por los ruegos de mi Madre, enviaré mi voz clara a esas abejas, excepto sobre mis amigos, que se encuentran en el mundo tan sólo en cuerpo, y predicaré misericordia. Si me atienden se salvarán”, Cf. Cfr. El Libro de las Revelaciones Celestiales, Santa Brígida de Suecia, Libro I, Capítulo 44, Pág., 71.


Por eso es mejor repetir, una y otra vez: “A ti clamo, Señor: escúchame. Ten compasión de mí, ¡respóndeme! El corazón me dice: ‘Busca la presencia del Señor’. Y yo, Señor, busco tu presencia. ¡No te escondas de mí! ¡No me rechaces con ira! ¡Mi única ayuda eres tú! No me dejes solo y sin amparo, pues tú eres mi Dios y salvador”, Cf. Salmo 27:7-9.


                                                     

Pero en medio de esta sana discusión, las Sagradas Escrituras y algunas Revelaciones particulares en la Iglesia Católica, como la que acabamos de transcribir, tal parece si nos dan pistas de cuál de las Divinas Personas, lo hizo abiertamente, por innumerables de ocasiones y en su gloria Eterna. Veamos:

"-Ahora dime cómo te llamas tú -pregunto Jacob. Pero el hombre contestó: -¿Para que me preguntas mi nombre? Luego el hombre lo bendijo allí mismo. Y Jacob llamó a aquel lugar Penuel, porque dijo: ¡He visto a Dios cara a cara, y sin embargo todavía estoy vivo!"., Génesis 32, 29-30.

“Yo Soy el Dios de tus antepasados. Soy el Dios de Abraham, de Isaac y de Jacob. Moisés se cubrió la cara, pues tuvo miedo de mirar a Dios. Pero el Señor siguió diciendo: -Claramente he visto…”., Cf. Éxodo 3:6:7ª.



Tabla Especial

"JESÚS EL SEÑOR SE DEJA VER Y HABLA CON MOISES"
1 de 1 Distancia: 8.038 - Probabilidad 1:327.804 - Fiabilidad Alta


  






"Vi al Señor cómo estaba antes de criar cosa alguna y con admiración reparé dónde tenía su asiento el Altísimo, porque no había cielo empíreo, ni los demás inferiores, ni sol, luna ni estrellas, ni elementos, y sólo estaba el Criador sin haberlo criado. Todo estaba desierto, sin el ser de los ángeles, ni de los hombres, ni de los animales; y por esto conocí que de necesidad se había de conceder estaba Dios en su mismo ser y que de ninguna cosa de las que crió tuvo necesidad ni las hubo menester, porque tan infinito era en atributos antes de criarlas como después; y en toda su eternidad los tuvo y los tendrá, por estar como en sujeto independiente e increado. Y ninguna perfección perfecta y simple puede faltar a su divinidad, porque ella sola es la que es y contiene todas las perfecciones que se hallan en todas las criaturas por inefable y eminente modo, y todo cuanto tiene ser está en aquel ser infinito como efectos en su causa"., Cf. Mística Ciudad de Dios, S. María de Jesús de Agreda, Primera Parte, Libro I.- Cap. 3, # 30, Págs., 30 y 31.

En consecuencia, para la Santísima Trinidad no hay pasado ni futuro, sino que absolutamente todas las cosas están en un eterno presente ante su sus ojos misericordiosos y justos.

“En la gloria eterna, cuando el Todopoderoso quiere hacernos saber un hecho histórico, no necesita relatárnoslo ni exhibirlo en una sala cinematográfica. Basta que nos ubique en los espacio-tiempos que corresponden a ese acontecimiento. No sufrimos ninguna molestia, porque ya estamos glorificados. Tampoco alteramos el suceso histórico, toda vez que éste permanece inmutable en la quinta dimensión”., Cf. “Tierna-Amada”, ‘¿Qué hay más allá de este aquí?’, Dr. Ricardo Pérez Hernández, Capítulo XV, Pág., 87 (1995), Hijos de la Divina Voluntad.

Siendo Dios eterno e inmutable debemos unirnos a Él por ser lo único que permanecerá para siempre. El más funesto engaño de las personas humanas como simples criaturas es cuidar únicamente de lo que presto desaparece y olvidarse de asegurar lo eterno, la misma gloria del Señor Jesús.

“Jesús les contestó:-Les aseguro que Yo existo desde antes que existiera Abraham”., Cf. San Juan 8:58.

 “-¡No tengan miedo! ¡Tranquilícense! Alaben siempre a Dios. Si yo he estado con ustedes, no fue porque yo lo quisiera, sino porque Dios lo dispuso. Denle gracias a Él todos los días, alábenlo a él”., Cfr. Tobit 12:17-18.

Afirmar la superioridad de Nuestro Señor Jesucristo sobre Moisés era algo que siempre hacía impresión a mentalidades Judías.

“Por eso he dicho: Aquí estoy, tal como el Libro dice de Mí”., Cf. Salmo 40:7.

“Todos los profetas habían hablado ya de Jesús, y habían dicho que quienes creen en él reciben por medio de él el perdón de los pecados”., Cf. Los Hechos 10:43.Ver Imagen.

“Jesús merece más honor que Moisés”., Cf. Hebreos 3:3.


Los autores sagrados con estos versículos prueban la divinidad de Jesucristo, conforme lo hace el código secreto de la Biblia en toda su extensión. Pero lo más interesante de todo es como estos autores nos quisieran revelar ya mismo y con toda seguridad ¿De quién fue realmente el que se reveló al mismo Moisés en medio de su grandeza divina y eterna? ¡Nada más que Jesús, pero desde  su gloria trina y sin tomar todavía cuerpo físico alguno! 

Los autores sagrados con estos versículos prueban la divinidad de Jesucristo, conforme lo hace el código secreto de la Biblia en toda su extensión. Pero lo más interesante de todo es como estos autores nos quisieran revelar ya mismo y con toda seguridad ¿De quién fue realmente el que se reveló al mismo Moisés en medio de su grandeza divina y eterna? ¡Nada más que Jesús, pero desde  su gloria trina y sin tomar todavía cuerpo físico alguno!

Siglos después. El mismo ya en persona –como Hombre Dios- lo revelaría. Ahí tenemos el caso de Santa Brígida de Suecia, a quien se lo expreso, con lujo de detalles y fuera de toda duda: “Yo Soy el Creador del Cielo y de la tierra, uno en divinidad con el Padre y el Espíritu Santo. Yo Soy el que habló a los profetas y patriarcas, y a quien ellos esperaban. Para cumplir sus deseos y de acuerdo con mi promesa, tomé carne sin pecado ni concupiscencia, entrando en el cuerpo de la Virgen, como el brillo del sol a través de un clarísimo cristal. Igual que el sol no daña al cristal entrando en él, tampoco se perdió la virginidad de mi Madre cuando tomé la humana naturaleza. Tomé carne pero sin abandonar mi divinidad. No fui menos Dios, todo lo gobernaba y abastecía con el Padre y el Espíritu Santo, pese a que, con mi naturaleza humana, estuve en el vientre de la Virgen. Igual que el resplandor nunca se separa el fuego, tampoco mi divinidad se separó de mi humanidad, ni siquiera en la muerte. Lo siguiente que deseé para mi cuerpo puro y sin mancha fue ser herido desde la planta de mis pies hasta la coronilla de mi cabeza, por los pecados de todos los hombres, y ser colgado en la Cruz. Ahora mi cuerpo se ofrece cada día en el altar, para que las personas puedan amarme más y recordar mis favores con más frecuencia”, Cf. El Libro de las Revelaciones Celestiales, Santa Brígida de Suecia (1302-1373), madre, viuda, fundadora de la Orden del Santísimo Salvador Mística, Libro I, Capítulo Uno, Pág., 1.
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Con razón. “Desde la mañana hasta la tarde, Pablo les habló del Reino de Dios. Trataba de convencerlos acerca de Jesús, por medio de la ley de Moisés (La Torah ) y los escritos de los profetas. Unos aceptaron lo que Pablo decía, pero otros no creyeron. Y como no se ponían de acuerdo entre sí, comenzaron a irse, Pablo les dijo: -Bien habló el Espíritu Santo a los antepasados de ustedes por medio del profeta Isaías, diciendo: ‘Anda y dile a este pueblo: por más que escuchen, no entenderán; por más que miren, no verán’. Pues la mente de este pueblo está entorpecida, tienen tapados los oídos y sus ojos están cerrados, para que no puedan ver ni oír, ni puedan entender; para que no se vuelvan a mí, y yo no los sane. Sepan ustedes, pues, que de ahora en adelante esta salvación de Dios se ofrece a los no judíos, y ellos sí escucharán”., Cf. Los Hebreos 28:23b-28.

“¡Que la gloria y el poder sean suyos para siempre! Así sea”., Cfr. El Apokalypsis 1:6c.

La Biblia nos presenta a Moisés como un contemplador de relieve extraordinario. Sus relaciones con Dios Glorioso se desarrollan en un clima de inmediatez, en un mano a mano y cara a cara con el Señor, no exento de cierta suspensión dramática que siempre produce la proximidad de Dios. Toda la grandeza humana y profética de Moisés, la sintetiza el Éxodo con las siguientes palabras: ‘Dios hablaba a Moisés cara a cara, como habla un hombre a su amigo’( Éxodo 33:11)”., Cf. ‘Muestrame Tu Rostro’, Pbro. Ignacio Larrañaga, Capítulo 3, Silencio y presencia, Pág., 257-258 ( 1980).Ver Imagen.

“Prometo darles cosas grandes, pero ahora no las menciono; lo advertirán a medida que permanezcan cautivos de Mi Palabra”., Cfr. Nuestro Señor Jesucristo a la Vidente la Estigmatizada Católica, Catalina Rivas,  el 18.1.96.

“Si Moisés no hubiese llevado registro sino de los antepasados de Jesucristo, una claridad excesiva se había producido; si no hubiera marcado la de Jesucristo, no hubiera habido bastante claridad”.,Cfr. Blas Pascal, Pensamientos, Capítulo XII, # 9, (1623– 1662),  Pág., 53.

“Con nuestra Señora se acercan dos hombres – ¡Es Moisés!, lo reconozco, dice: ¡El Tiempo no cambia! ¡Oh! El otro que viene con Moisés, es Isaías, mira a la gente y exclama: ¡Los jóvenes profetizaran, los ancianos tendran sueños! (Cf. Hechos 2: 17-21; Joel 2: 28 – 32 ) Abrid el Libro, el Libro de la Verdad, reunid vuestra familia, leed, estudiad con vuestros hijos el Libro de la Vida, ¡La Biblia! ¡La Familia debe tener una fe sólida!”., Cf. Apariciones de  Nuestra Señora de las Rosas en Bayside, el Viernes 7 de Septiembre de 1973 ( Pág., 247).

Moisés era de la tribu de Leví. Sus padres se llamaban Amram y Yoquebed ( Cfr. Éxodo 6: 20; Números 26: 57-62 ). Su propia vida y obras constituyen  la materia del Pentateuco ( El Toráh) libros que escribió él mismo delante del Altísimo Omnipotente ( Elyon El-Saday ). La historia de Moisés constituye como una séptima parte de la Sagrada Biblia entera y ocupa un espacio igual a dos tercios del Nuevo Testamento.

 “Por primera vez, el Sínodo de los Obispos quiso invitar a un Rabino para que nos diera un valioso testimonio sobre las Sagradas Escrituras judías, que también son justamente parte de nuestras Sagradas Escrituras”., Cf. S. s Benedicto XVI, Exhortación Apostólica Postsinodal, Verbum Domini, Introducció, Ob. Cit.  # 4, Pág., 11.



                                                                 Catorah 2014

“Moisés era más alto, más majestuoso y venerable que Elías, tenía sobre la frente como dos cuernos o excrecencias brillantes y vestía una túnica larga. Era un hombre imponente como un preceptor: serio, pero justo y sencillo”., Cf. ‘Visiones y Revelaciones’, de S.Ana Catalina Emmerick, Tomo Tercero, Libro II y VIII, Capítulo XXVII, Pág., 293.Ver Imagen.

Entonces como vemos Dios, Uno y Trino quiso enseñar la doctrina a cada persona humana es porque contiene verdades que nosotros solos no podíamos conocer: ¡Que el que es! Es el mismo Jesús desde la Eternidad (en el Antiguo Testamento) y el mismo Hombre-Dios encarnado (en el Nuevo Testamento).

“Así, aparece claramente que quien da unidad a todas las ‘Escrituras’ en relación a la única ‘Palabra’ es la persona de Cristo”., Cf. Ob. Cit. Verbum Domini, # 39, Pág., 77 ( 2011 ).

En la doctrina cristiana hay también muchas verdades y varias nuevas - como el código secreto del Torá - que nosotros solos hubiéramos podido conocer; pero como son muchas y hay algunas muy trabajosas, nos hubiéramos equivocado al querer conocerlas, pues sabemos que nosotros los humanos nos equivocamos muchas veces y en muchas cosas; esta es la segunda razón por la cual Dios nos reveló la doctrina católica, es decir, porque nos hubiéramos equivocado al estudiar las verdades que nosotros solos podemos conocer.

Ahora bien. En Jesucristo hay dos naturalezas: una divina, porque era Dios desde toda la Eternidad; y otra humana, porque era hombre perfecto. Jesucristo es Dios desde toda la Eternidad, puesto que es la segunda persona de la Santísima Trinidad que se le manifestó  a Adán y a Eva y conversaba con ellos, les decía quien era El en su creación y qué tenían que hacer ( Cf. Génesis 2:16-17 ); después se aparecía también a los patriarcas es decir a Noé ( Cf. Génesis 6: 7 – 8 ) , a Abraham, a Jacob, etc.,  y hacía lo mismo que con Adán y Eva; a Moisés se le apareció varias veces, principalmente en el Monte Sinaí donde le enseñó los diez mandamientos; a Moisés le mandó Nuestro Señor que escribiera muchas verdades que ya había enseñado y muchos de los acontecimientos que habían sucedido desde la creación del mundo y que hiban a suceder hasta la consumación de los siglos. Después de Moisés, Dios escogió a unos hombres, que se llamaban Profetas, para que escribieran lo que pasaba en el pueblo de Israel, lo que Él quería enseñar y también se custodiara: Los Sellos Bíblicos.

Pero Moisés y los Profetas cuando escribían lo que Nuestro Señor ( Su naturaleza Divina ) les mandaba, no escribían solos, sino que Dios les hiba dictando, inspirando y mostrando todo lo que quería que escribieran y revelasen; esto es muy importante y hay que tenerlo bien presente; Dios mandaba que se escribieran esas verdades, advertencias y unciones, y El mismo las iba protagonizando directa e indirectamente como Segunda Persona de la Santísima Trinidad que era desde la Eternidad.

LA LEGITIMACIÓN DE JESÚS EN SU NATURALEZA DIVINA EN LAS SAGRADAS ESCRITURAS

El milagro –en primer lugar- es un prodigio no común, un fenómeno insólito, algo que irrumpe sobrenaturalmente desde la eternidad presentándose en un tiempo y espacio escogido por Dios y que llama siempre la atención dentro del entorno donde se produce. Como tal, es observable sorpresivamente por una o varias personas ( Cf. Éxodo 40:38 ) quienes, a su vez, pueden expresar su testimonio valedera y libremente acerca de él ( Cf. Éxodo 3: 3 ). Es un hecho que aparece realmente sustraído al curso habitual de la naturaleza, porque no existen fuerzas naturales conocidas ni desconocidas, que puedan señalarse como su explicación. Es siempre signo de la benevolencia de Dios para con los hombres, o señal que simboliza lo sobrenatural a través de lo natural y sensible, o sello que confirma de parte de Dios Uno y Trino a una persona, a un santuario, a un Dogma. Por eso, el milagro se da siempre rodeado de circunstancias dignas de Dios y que sugieren por sí mismas el origen divino –y no humano ni diabólico-del acontecimiento.

Ahora bien, ¡Toda la Persona de Jesús es un Milagro perpetuo! Puesto que en Jesucristo hay dos naturalezas, hay también dos entendimientos, uno que corresponde a la naturaleza divina y otro a la humana. Por la misma razón hay también en ÉL dos voluntades; pero no hay sino una sola memoria, porque en cuanto Dios no necesita memoria, ya que tiene las cosas en un eterno presente. Como lo vamos a ver, ÉL ES.

Respecto a su naturaleza Divina bástenos decir que está fué la que se le presentó en parte a Moisés y que tenía todas las perfecciones propias de la Divinidad ( Cf. Éxodo 33: 20 ).

Al ser Eterna su persona  Moisés alcanzó a percibir las dos naturalezas del Señor: una Divina, por que era Dios; y otra humana que todavía, no se había encarnado ( Cf. Éxodo 34: 5 – 7 ). San Juan en el primer capítulo de su Evangelio nos enseña esa doble verdad: “ En el principio ya existía la Palabra; y aquel que es la Palabra estaba con Dios y era Dios. El Estaba en el principio con Dios. Por medio de él Dios hizo todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin Él. En él estaba la vida, y la vida era la luz de la humanidad. Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla”., ( Cf. San Juan 1:1-5 ).  Y San Pablo, dice: “Jesucristo es el mismo ayer, hoy y siempre. No se dejen ustedes llevar por enseñanzas diferentes y extrañas”.,  ( Cf. Hebreos 13:8ª. ).

En la naturaleza humana de Nuestro Señor Jesucristo que ya estaba en la Eternidad pero que ‘NO’ se había encarnado, pudo Moisés distinguir de forma Milagrosa dos elementos: Una parte ínfima de su cuerpo y alma en la Gloria. Pues no olvidemos aquellas palabras de San Juan: “Nadie ha visto jamás a Dios” en toda su Plenitud ( Cf. San Juan 1:18ª ).

1. Parte del Cuerpo del Señor que vio Moisés era real, pero estaba todavía en la Gloria Divina: A) “Cuando pase mi gloria, te pondré en un hueco de la roca y te cubriré con mi mano hasta que yo haya pasado. Después quitaré mi mano, y podrás ver mis espaldas; pero mi rostro no debe ser visto”., ( Cf. Éxodo 33: 22 ). B) Moisés al bajar del Monte Sinaí, “no se dio cuenta de que su cara resplandecía por haber hablado con el Señor”., ( Cf. Éxodo 34: 29c ).

2. Ya cuando se encarnó Nuestro Señor, esto sucedió: A) “Jesús le dijo: -Suéltame, porque todavía no he ido a reunirme con mi Padre. Pero ve y di a mis hermanos que voy a reunirme con el que es mi Padre y Padre de ustedes, mi Dios y Dios de ustedes”., ( Cf. San Juan 20: 17 ). B) “Miren mis manos y mis pies. Soy Yo mismo. Tóquenme y vean; un espíritu no tiene carne ni huesos como vosotros veis que yo tengo”., ( Cf. San Lucas 24:39 ).

3. El Alma de Nuestro Señor –siempre-  HA SIDO, ES Y SERÁ, como la nuestra, un espíritu creado por DIOS PADRE para animar su cuerpo perfecto. Ya el mismo profeta mayor, lo había profetizado: “El espíritu de Dios estará continuamente sobre Él, y le dará sabiduría, inteligencia, prudencia, fuerza, conocimiento y temor del Señor. El no juzgará por la sola apariencia, ni dará su sentencia fundándose en rumores. Juzgará con justicia a los débiles y defenderá los derechos de los pobres del país. Sus palabras serán como una vara para castigar al violento, y con el soplo de su boca hará morir al malvado. Siempre irá revestido de justicia y verdad”, Profeta Isaías 11, 2-5.

Y, tiempo después en la persona misma de Nuestro Señor, esta gran profecía se haría realidad: “Jesús le contestó: -Felipe, hace tanto tiempo que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conoces? El que me ve a mí, ve al Padre; ¿por qué me pides que les deje ver al Padre? ¿No crees que Yo estoy en el Padre y el Padre está en mí? Las cosas que les digo, no las digo por mi propia cuenta. El Padre que vive en Mí, es el que hace su propio trabajo. Créanme que Yo estoy en el Padre y el Padre está en mí; si no, crean al menos por lo que hago”, Cf. San Juan 14, 9-11.

Es más. El mismo Señor Jesús, con esta revelación nos dice: “En el mercado se había reunido un gentío. Mientras me miraban caminar hacia ellos se apresuraban gritando: ¡Es el profeta, Jesús! Cuando mis discípulos los pudieron calmar y les habían pedido que se sentaran, les hablé diciendo: “Para muchos se necesita un milagro para creer en Dios, y sin embargo cada día los Milagros de Dios están ante ustedes. Sólo que a menudo no los notan. El aire que respiran es uno de los Milagros de Dios, ¿pero cuántos reflexionan en ello? El agua que beben, el alimento que comen… Milagros de Dios, ¿pero cuántos piensan en esto? Cuando ustedes se miran mutuamente, creados a Semejanza de Dios, es un milagro… ¿pero cuántos lo ven? ¡Tantos milagros ante ustedes, a cada momento de su vida, y sin embargo buscan más! Entiendan lo que ustedes reciben de Dios a cada momento de su vida, y vean en todo los Milagros de Dios”, Cfr. “A través de los ojos de Jesús”, Carver Alan Ames, 2 de Marzo de 1996, Volumen 1, Pág., 61.

Podemos decir que la presencia de Jesús en persona en tierra santa fue un gran milagro. No solo porque por medio de él se manifestaban las otras dos personas divinas, sino, que por medio de su cuerpo, alma, espíritu y mente divina se esparramaban y se esparraman incontables milagros. 


Entonces no hay ninguna duda frente al Alma Divina de Jesús. Era sí, infinitamente más perfecta, ya en sus facultades, ya en sus dones sobrenaturales. A) “Ustedes mismos son testigos de las grandes cosas que ha hecho el Señor”, (Cf. Deuteronomio 11: 7). B) Este es el Dios, “que da vida a los muertos y crea las cosas que aún no existen”, (Cf. Romanos 4:17d).

¡SOY, SIEMPRE! 



"Yo, en la persona de mi Hijo Jesucristo, a pesar de todo mi Poder y Omnipotencia, me mostré humilde y sencillo, nunca hice alarde de Fuerza ni de mi Poder Absoluto para tratar de sojuzgaros"., Cf. Mensaje de Dios Padre, el 20 de Julio de 1999, Tomo VI, Página 111.

Esto mismo fue lo que paso en el día de la Transfiguración de Jesús sobre el Monte Tabor. Toda su Majestad se manifestaria ante sus apóstoles. La misma que estaban viendo y gozando al mismo tiempo en las moradas celestiales Moisés, Elías y Malaquías. 

La vidente de Flamske, diócesis de Münster, en Westfalia, nos narra este evento –reseñado en San Lucas 9: 28-36, en San Marcos 9: 1-13 y en San Mateo 17: 1-13- que estando  Pedro, Santiago y Juan “en éxtasis, caídos sobre sus rostros”. De pronto vio entrar, “en la luz que rodeaba a Jesús, a tres seres resplandecientes. Llegaron en una forma natural, como quien viniendo de la oscuridad entra en un lugar de luz. Dos aparecieron más distintos y más corpóreos”. 

“Hablaban con Jesús y eran Elías y Moisés; la tercera aparición no habló: era más espiritual y tenue, y era el profeta Malaquías. Yo oía cómo Moisés y Elías saludaban a Jesús, y cómo Él hablaba de la Redención y de su pasión. Su encuentro era natural, como acostumbrado. Moisés, era un hombre imponente como un preceptor: serio, pero justo y sencillo”.


“Moisés dijo a Jesús cómo se alegraba de ver de nuevo a Aquél que le había guiado a través del desierto con el pueblo sacado de Egipto, al que ahora iba a salvar y a redimir del pecado. Recordó muchas cosas de sus tiempos, que eran figuras de estos hechos de ahora y habló del cordero pascual y del Cordero de Dios… Elías y Moisés, daban gracias a Dios de que se hubiese compadecido de su pueblo desde la Eternidad”, Cf. “Visiones y Revelaciones Completas”, de la Beata Sor Ana Catalina Emerick, Tomo III, Libro II y VIII,  Capítulo XXVII, Pág., 293 y 294. Apartes.
Pero Moisés y los Profetas cuando escribían lo que Nuestro Señor les mandaba, no escribían solos, sino que Dios les  iba inspirando todo lo que quería que escribieran; esto es muy importante y hay que tenerlo bien presente; Dios mandaba que se escribieran esas verdades, y El mismo iba participando de cada una de ellas. Cuando vino Nuestro Señor al  mundo, El enseñó las verdades que Dios ya había enseñado, las explicó, enseñó y ocultó varias por medio de unos Sellos. Algunos Apóstoles y discípulos de Jesucristo –llenos del Espíritu Santo- escribieron una parte de las cosas que Él hizo y algunas de las verdades que enseñó; otros escribieron cartas, que se llaman epístolas, para recordarles a los cristianos las verdades que habían aprendido y para enseñarles otras nuevas.

Pero todo eso que escribieron los Profetas, los Apóstoles y los Discípulos de Nuestro Señor en hebreo, arameo y en griego, tampoco lo realizaron solos, sino que Dios les inspiraba lo que debían escribir exactamente.

“Jesús se sienta en la ‘cátedra’ de Moisés, pero no como los maestros que se forman para ello en las escuelas; se sienta allí como el Moisés más grande, que extiende la Alianza a todos los pueblos. De este modo se aclara también el significado del monte ( Para nosotros de ‘ El Instante del Sinaí’  ). Ahora Dios habla muy cerca, como hombre a los hombres. El ‘Sermon de la Montaña’ es la nueva Torá que Jesús trae. Moisés sólo había podido traer su Torá sumiéndose en la oscuridad de Dios en la montaña; también para la Torá de Jesús se requiere previamente la inmersión en la comunión con el Padre”., Cf.  Ob. Cit. De Benedicto XV,  Capítulo IV, Pág., 93  (Extractos ), 2008. 

Cuando pronunciemos alguno de los nombres del Hijo de Dios hecho hombre, acordémonos de lo que significan esos nombres santos del Altísimo, para adorarlo como a verdadero Dios y para darle gracias por los beneficios tan grandes que nos ha hecho; pensemos que si no hubiera sido por Él, todos estaríamos en poder de las Tinieblas en el mundo, todos tendríamos que sufrir el castigo del infierno perpetuo y no podríamos recibir la gracia para ir al cielo eterno. 

“Jesús, ¿te puedo llamar por tu Nombre?, cuestinó. Por supuesto que puedes, pues en mi Nombre hay más de lo que crees, dije, mientras me miraba y sonreía sin saber lo que Yo quería decir”, Cf. “A través de los ojos de Jesús”, Carver Alan Ames, Volumen I, 10 de Julio de 1996, Pág., 278. 

Repetimos. Pronunciemos todos los nombres de Jesucristo con un respeto y con un amor muy grandes (Yo Soy, Yavé, Emmanuel, Mesías); particularmente debemos pronunciar con mucha frecuencia el Santo Nombre de JESÚS porque tiene un poder muy grande delante de Dios, y porque ese nombre bendito es suficiente para ahuyentar al demonio y para librarnos de muchos peligros. Inclusive es suficiente para sanar cualquier enfermedad si tenemos fe.
“El Nombre de Jesús está en el Corazón de la Plegaria cristiana”., Cf. Catecismo Universal, Artículo # 435, Pág., 102, I Parte, La Profesión de Fe ( 1992 ).

La Iglesia nos enseña muy bien el poder que tiene el Santo y Poderoso Nombre de Jesús porque todas las oraciones que ha formado las termina diciéndole a Dios que oiga esas oraciones por el Nombre y por los méritos de Jesucristo que es su Hijo Santísimo que vive y reina con Él por todos los siglos; cuando hagamos alguna oración, hagámosla siempre unidos a Jesucristo y pidámosle a Dios que nos oiga por el gran poder que tiene el Nombre de Jesús; si oramos en el Nombre de Jesús, Dios oirá siempre nuestras oraciones, porque el mismo Jesucristo Nuestro Señor nos enseñó que todo cuanto pidamos en su nombre, Dios lo concederá.

“Sólo quien es Dios, ve a Dios: Jesús. Él habla realmente a partir de la visión del Padre, a partir del diálogo permanente con el Padre, un diálogo que es su vida. Si Moisés nos ha mostrado y nos ha podido mostrar sólo la espalda de Dios, Jesús en cambio es la Palabra que procede de Dios, de la contemplación viva, de la unidad con Él. En su oración sacerdotal Jesús acentúa que Él manifiesta el nombre de Dios, llevando a su fin también en este punto la obra iniciada por Moisés”., Cf. Ob. Cit. Benedicto XVI, Capítulo 8, Págs. 313 – 314 ( 2008 ).


El Origen Real del Idioma Hebreo


“Es claro que el texto de los evangelios sinópticos se originó de una traducción griega de una biografía hebrea de Jesús. Probablemente escrita por el Mateo de la tradición. Los materiales son muy hebraicos para haber sido originados en griego, como muchos eruditos bíblicos incorrectamente han pensado. Felizmente, si usamos las herramientas correctas, podemos hoy volver a escuchar a Jesús como sus contemporáneos judíos del primer siglo le escucharon”., Cf. Jesus, Rabi & Lord, Center for Judaic Studies, 1987, Dr. Robert L. Lindsey, quien fundó, junto con el Dr. David Flusser la Escuela de Jerusalén de Investigación Sinóptica.
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“Los Semitas no eran tampoco tan numerosos como los de Cam y Jafet. Entre los Semitas formaban  una raza más preservada los descendientes de Heber y luego de Abrahán. Sobre Heber, que no tomó parte en la construcción de Babel, puso sus ojos Dios para separarlo a él y a su descendencia de la común corrupción del mundo y hacerse de esta raza un pueblo más santo. Por este motivo Dios dio a este pueblo un idioma santo que no tuvo otro pueblo, para que se mantuviera separado de los demás., Cf. Génesis 10: 21. Este idioma es la pura lengua hebrea o caldea. La lengua ‘madre’ que hablaron Adán, Noé y Sem fue otra, y de ella no queda sino algo en cada una de las lenguas diversas existentes. Las primeras puras hijas de esta lengua primitiva son los idiomas de los Bactrios, el Zend y la Sagrada Lengua de los Indos. De estas lenguas hay aún palabras, como en el bajo alemán de mi pueblo nativo. En este mismo idioma está escrito el libro que yo veo aun existente en el actual Ktesifonte, en el Tigris. Heber vivió en los tiempos de Semíramis”., Cf. Visiones de La Torre de Babel, S. Ana Catalina Emmerick, Tomo Segundo, Libro 1 y 4, Capítulo XX,  Pág. 49, Tercera Parte.




Tabla Especial

"LENGUA HEBREA DADA POR YAVÉ A HEBER"
1 de 1 Distancia: 4.082 - Probabilidad: 1:403.872 - Fiabilidad Alta


Pero más tarde, cuando los Israelitas volvieron de su exilio babilónico, habían perdido cada vez más su lengua materna divina (el hebreo con sus 22 letras ) sustituyéndolo por el Arameo, que se había convertido en la lengua escrita oficial del imperio persa. Los Profetas y los judíos ilustrados seguían comprendiendo el Hebreo, pero la mayor parte del pueblo sencillo lo había perdido casi del todo.

“Son letras de la verdad que sólo pronuncian los que las conocen. Cada letra es un pensamiento completo, porque son letras escritas por el Padre”., Cf. ‘Evangelio de la Verdad’, Contenido del Libro, 3 Previsión Salvífica (Extractos).


Esta cita anterior nos la confirma el Rabino Moshe Cordovero (1522-1570), con tan solo la letra hebrea Alef (Aleph). Según su persona esta letra contenía encerradas las cuatro letras del Nombre y único Dios: Yavé. También hace referencia de "Los Atributos de Dios", de "Tres se convierte en nueve", "Él no está sujeto al Tiempo" y "No hay principio a su principio"., Cf. Pardes Rimonim.

 


Catorah 2014



                                                        Imagen de Jerome Rothenber



De este modo especial, el texto original sagrado  podía leerse en hebreo antiguo durante el servicio religioso, pero después tenía que ser traducido al arameo y explicado como lo hizo innumerables de veces el Señor Jesús., Cf. San Lucas 2: 46; 4:16-21; 4: 44;  San Juan 7:28.

A estas traducciones del Hebreo puro y del Arameo puro, se las denominó: ‘Targum’. Los Targume más famosos, cuyo textos todavía se conservan, proceden del siglo V Antes de Jesucristo, y son el ‘Targum de Onkelo’ para los cinco libros de Moisés, el Pentateuco o la misma Torah, y el ‘Targum de Jonatán’, para los profetas.



Eliezer Ben Yehuda (1858 – 1922) lideró el renacimiento del hebreo como lengua hablada. Después de inmigrar a Eretz Israel (la tierra de Israel ) en 1881. Allí él comenzó a promocionar el uso del Hebreo en casas y escuelas. Creó miles de nuevas palabras e inició dos periodicos en Hebreo y cofundó el comité de Lengua Hebrea Original ( en 1890) y escribió un Diccionario completo de Hebreo Antiguo y Moderno, en 17 tomos, comenzado por su persona en 1910 y terminado por su esposa e hijo en el año de 1959. Ya a finales del siglo XX se adaptó parte del mismo al Software del Código de la Biblia. El uso del idioma Hebreo como lengua hablada ceso hacia el año 250 después de Nuestro Señor Jesucristo. Ver Imagen.

Posteriormente los escritos del Antiguo y del Nuevo Testamento fueron concebidos en tres lenguas, dos semíticas y la griega.

Las lenguas semíticas se subdividen en un amplio sentido en el Egipcio y las lenguas semíticas en sentido estricto camíticas jóvenes:

1.Semítica oriental o acadía: a. Babilónica; b. Asiria.
2.Semítica occidental: a. Aclameo-Arameo; b. Amurrita-Cananeo.
3.Otros Dialectos amurrita-Cananeos, como fenicio-púnico, moabítico, etc.
4.Semítica Meridional: a. árabe; b.Etíope.

Podemos decir que el sagrado idioma Hebreo posee una sabiduría antigua que explica las normas del universo y la vida Creada  asistida por la Santísima Trinidad.

La Torá es la que posee el grado supremo de Kedushá, hecho que implica que cada palabra de su texto fue dictada por el Creador. La Torá es una edición Divina y selectiva de los acontecimientos considerados por Él como aleccionadores, que contiene un conjunto de Mitsvot que son indispensables para el desarrollo emocional y espiritual del ser humano y para hacer posible la convivencia con sus semejantes”.., Cf. “Devarim-La Parashá”, Pynchas Brener, 1994.

Presencia que se puede relacionar y descubrir en el Torah todo. Un Alfabeto contiene símbolos para cada sonido individual del habla. Los primeros escritores no usaban un alfabeto claro; sus símbolos representaban una palabra completa, y más tarde, sílabas.




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La Torá comienza con la letra bet: "Bereishit (En el principio) Dios creó los cielos y la tierra". 






Las letras del idioma hebreo son los llamados “ladrillos de la creación”, en la antigua obra mística atribuida al Patriarca Abraham, el “Sefer Yetziráh” o libro de la Formación, pues son ellas la materia prima con los cuales Yáhweh (Iahweh) hizo la creación del universo.


Tabla Especial


1 de 1 Coincidencias de: DIOS AL HOMBRE - A LA SEMEJANZA DE ÉL (DIOS) - LO HIZO - VARÓN Y HEMBRA LOS CRIÓ - Y LOS BENDIJO - 2050 (0502). Asociación a: VERBO (VOZ). Tipo de búsqueda Estándar Especial 1 de 1 – Distancia 8099 – Probabilidad 1:265.216 – Entre varias fiabilidad Alta en este pasado alternativo. ¿CREACIÓN? ® © @ En esta interesante Tablilla que providencialmente Dios permitió que descubriéramos, podemos captar lo siguiente: 1. Al Verbo Creador; 2. Su Voz Resonante en toda la Creación; 3. El Aliento Divino Soplando en toda su Obra; 4. El culmen de su Obra: la creación de la Persona Humana (Hombre y Mujer); 4. Dios mismo declaró que los había formado a su imagen y semejanza; 5. Dijo esto en razón del alma del ser humano, que es un espíritu dotado de entendimiento y voluntad, capaz de conocer, amar y hablar de Dios.



La Cifra cuántica codificada 2050 guarda un profundo significado: 2  = Dios (Con la Dalet) y su relación con su creación entera o la persona humana; 2 = Varón (Adán) y Hembra (Eva). 2= Alma y Cuerpo. Mundo Visible e Invisible. 2 = Principio (Alfa) y Fin (Omega). 20 = El Antiguo Hebreo y sus 20 letras sagradas. El Antiguo y Nuevo Testamento. Pecado y Gracia. Infierno o Cielo. 2 y 5 nos da 7 = La Perfección. Los dones del Espíritu Santo. Los Sacramentos. El 5 = significa "algunos", "unos cuantos", una cantidad indefinida. El Pentateuco (Torah)-  El 50 = Cincuenta es el número de la salvación y se encuentra  varias veces en la Biblia (Pentecostés). Sale también la cifra cuántica 70. 

"Entonces dijo: 'Ahora hagamos al hombre. Se parecerá a nosotros, y tendrá poder"., Cf. Génesis 1:26.

"Cuando Dios creó al hombre, lo creó parecido a Dios mismo; hombre y mujer los creó"., Cf. Génesis 1:27.

"En el principio ya existía la Palabra; y aquel que es la Palabra estaba con Dios (Elohim) y era Dios (Padre, Hijo y Espíritu Santo, el Ruaj Ha Kodesh). El estaba en el principio con Dios. Por medio de Él, Dios realizó y sigue realizando todas las cosas; nada de lo que existe fue hecho sin Él. En Él estaba la vida, y la vida era la luz de la Humanidad. Esta luz brilla en las tinieblas, y las tinieblas no han podido apagarla"., Cf. San Juan 1, 1 - 5. Es el mismo Verbo como Voz que nos describen los Salmos:

"El Señor, el Altísimo, hizo oír su Voz de trueno desde el Cielo"., Cf. Salmo 18:13.

"La Voz del Señor resuena con fuerza; la Voz del Señor resuena imponente"., Cf. Salmo 29:4.

"La Tierra se deshace cuando Él deja oír su Voz"., Cf. Salmo 46: 6b.

"Cuando el Señor hace oír su Voz de trueno desde el monte Sión, en Jerusalén, el cielo y la tierra se ponen a temblar"., Cf. Profeta Joel 3: 16ab.

"No se admiren de esto, porque va a llegar la hora en que todos los muertos oirán su Voz y saldrán de las tumbas. Los que hicieron el bien, resucitarán para tener vida; pero los que hicieron el mal, resucitarán para ser condenados"., Cf. San Juan 5: 28.

pesar de su aparente simplicidad, este Alfabeto contiene los secretos más profundos de la Creación. Es multi-dimensional. Las letras hebreas dan información por su nombre, letra y número, ya que los números hebraicos son las mismas letras. Además, va acompañado con esta sentencia, dictada por el mismo Hijo de Dios, que se revelo a toda la humanidad:

"Les aseguro que mientras existan el Cielo y la Tierra, no se le quitará a la Ley ni un punto ni una letra, hasta que suceda todo lo que tiene que suceder"., Cf. San Mateo 5:18.



Tabla Especial


1 de 1 Coincidencias de: DIOS DIO - ABC - HDEF - GIJ - KLMN - ÑOP - RST - VWYZ. Asociación a: ALEFATO. Tipo de búsqueda Estándar Especial 1 de 1 – Distancia 7990 – Probabilidad 1:20.991 – Entre varias fiabilidad Alta en este pasado alternativo. ¿LETRAS? ® © @ 

Con el Alfabeto Hebreo (Alefato) aparecieron los símbolos para las consonantes. A Jesús (Iahshuah) Nuestro Señor le tocó desembolverse en ambientes donde se hablaba el Arameo, Hebreo, Egipcio, Griego y Latín. Pero más con el Arameo, el Hebreo y hasta el Griego.
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“Entonces el Maestro tomó las tablillas que había traído consigo Jesús, y dijo: Escribiré doce letras. Y Jesús, colocándose ante su maestro, comenzó a observar primero las particularidades de la escritura, y después las letras. Cuando el Maestro las hubo escrito, entregó las tablillas a Jesús.

Gamaliel expuso: ¡Escúchame, hijo mío, y lee tal como yo te indique? Y comenzó a nombrar las letras. Jesús dijo: ¡Lo sé perfectamente, y lo que quisiera que me procurases es la explicación de la letra? El Maestro interrogó: ¿Qué quieres significar con esa petición, que no comprendo? El niño contestó a esta interrogación con otras tres inquietudes: ¿Qué es la letra? ¿Y qué es la palabra? ¿Y qué es la frase? Y Gamaliel se humilló, diciendo: ¡Dejo a tu cargo la respuesta, porque yo la ignoro?

Y Jesús, tomando la tableta, sin decir nada, se puso a leer, primero las letras, luego las palabras, y finalmente las frases.

Y Gamaliel replicó: ¿Pero dame antes la interpretación de las letras, para que las conozca? Respondió Jesús: ¿Tú eres maestro en Israel, y no sabes esto? Maestro, todo lo que me has escrito, lo he aprendido y lo sé perfectamente.

Ahora, para mi instrucción, escríbeme otra cosa, a fin de que la aprenda y la sepa? Gamaliel: ¡Todo lo que sé es lo que he aprendido de mis padres! Y Jesús expuso: ‘La letra simple significa por sí misma el Nombre de Dios.

 La palabra que nace de la letra, y que toma cuerpo en ella, es el Verbo Encarnado. Y la frase que se expresa por la letra y por la Palabra, es el Espíritu Santo’.

‘Tú no podrás comprender este misterio, que está oculto a las instituciones de la razón humana, hasta que el Señor, que escruta los pensamientos en todo lugar y en todo tiempo, lo revele a todos los nacidos, y reparta con profusión los dones del Espíritu Santo. Porque ahora, por lo poco que has visto de mí, y escuchado de mis palabras, puedes conocerme, y saber quién Soy’.

‘Empero más tarde, oyendo hablar de mí, me verás y me conocerás’. Y Gamaliel en su interior decía: ¡Verdaderamente, Hijo de Dios es éste! Yo creo que es el Mesías, cuyo advenimiento los profetas han anunciado. Y Gamaliel llamó a José. Y José preguntó a Jesús: ¿Resulta que eres tú quien enseña al maestro? Jesús contesto: ‘Lo que no sabía lo he aprendido, y lo que sé no necesito aprenderlo’.
  

Y Gamaliel exclamó: ¡No hables más, levántate, ve en paz! Y Jesús se levantó sin demora, tomo las tablillas, se prosternó ante Gamaliel, y le dijo: ¡Maestro bueno, otórguete Dios tu recompensa! Gamaliel: ¡Ve en paz, y realice el Señor tus deseos en bien tuyo! Y Jesús marchó a reunirse a su Madre, la cual lo interrogó: Hijo mío, ¿cómo has podido aprenderlo todo, en un solo día? Y Jesús afirmó: ¡Todo lo he aprendido, en efecto, y el Maestro no ha sabido responder satisfactoriamente a nada de cuanto le propuse?”.,Cf. “El Evangelio Armenio de la Infancia”, Relato de Santiago, ¿De cómo Jesús Adolescente fue confiado a Gamaliel para aprender las letras? Capítulo 20:1-6 ( Extractos Apócrifos).  

El termino Apócrifo fue adoptado por la Iglesia Católica para designar los libros cuyo autor era desconocido y los cuales desarrollaban temas ambiguos, que aun presentándose con carácter sagrado, no tenían solidez en su doctrina e incluían elementos contradictorios a la verdad revelada. Esto hizo que estos libros fueran considerados como sospechosos y en general poco recomendables.

La mayoría de ellos se encuentran en la lengua original griega, copta o siríaca. En los primeros siglos del cristianismo, circularon innumerables versiones de evangelios. Muchos de ellos eran invenciones de supuestos iluminados. Y otros no concordaban entre sí. La selección fiel de los libros protocanónicos, deuterocanónicos y canónicos se realizó en el Concilio de Nicea en el año de 325 D. de Jc. Fueron ratificados en el Concilio de Laodicea en el año 363 D. de Jc. 

Poco tiempo después de la caída de la Torre de Babel, otros pueblos como el griego lo habían adaptado a su propia cultura con la adición de las vocales.

Las letras del Hebreo Antiguo… Éste fue el primer alfabeto que registró con exactitud el desarrollo del “Gen del Lenguaje” en el hombre ( Cf., Génesis 2:19-20 ), y el que se convertiría en el ancestral de muchos otros, incluido el alfabeto del idioma español. Este “Gen” nos hace pronunciar las primeras palabras: “Mamá” – “Papá” aproximadamente a los 12 meses tras nuestro nacimiento, y entre los cinco y seis años de edad nos ayudará a dominar los aspectos esenciales del lenguaje. Nosotros los seres humanos tenemos unos 100.000 genes, cada uno compuesto de miles de travesaños químicos y uno de los genes espectaculares es el “Gen del Lenguaje”.

El Código Secreto de la Biblia nos habla de este “Gen” con las siguientes palabras:


Tabla Especial

"ALMA  CUERPO GEN HABLA CREA DIOS DIO A ADÁN"
1 de 1 Distancia: 173 - Probabilidad: 1:391.065 - Fiabilidad Alta


El alma es la parte espiritual de la persona humana, que comunica al cuerpo vida, sensibilidad y pensamiento ( Cf. Sabiduría 2:2b ). Las plantas viven: tienen vida vegetativa. Los animales viven y sienten: tienen vida vegetativa y sensitiva. El hombre vive, siente y piensa: tiene vida vegetativa, sensitiva e intelectiva. El alma humana, creada inmediatamente por Dios, Uno y Trino y unida a nuestro cuerpo, está en todas y en cada una de sus partes, pero con distinta actividad o potencia en los distintos órganos ( El Cerebro humano, el Corazón, etc. ).

El Cerebro es el órgano más complicado del cuerpo humano. A nivel celular se compone de dos clases de células: las neuronas ( unas 42 billones) y las neuroglías. Cada ‘neurona’ es como un nano-ordenador, pero mucho más perfecto que cualquier computador conocido hoy en día. Tienen unas 200.000.000.000.000 conexiones entre ellas con idéntica capacidad en petabyte. Esto es mucho más que el número de estrellas que se estima haya en la galaxia NGC 5970, bastante parecida a la nuestra. Estas células trabajan juntas para enviar impulsos eléctricos a un índice de 300 millas por hora. Dada la naturaleza de la Electricidad en el cerebro, se ha convenido en llamarla ‘bioelectricidad’. Nuestro Cerebro tiene la capacidad de Almacenar hasta 108.432 bits. Sino, es que es más. Pues el Alma y el Espíritu humanos, son, ilimitados. 

Las células nerviosas del cuerpo humano envían unos 2100 impulsos al cerebro cada segundo. Estos impulsos vienen de receptores de luz en el ojo, de sonido en los oídos ( Cf. Job 34:1-2 ), de papilas gustativas y de áreas táctiles que sumados serían unos 800.000. Mientras que todo lo anterior ocurre, nuestro cerebro que esta completamente protegido por la bóveda ósea llamada cavidad craneal no se mueve, aunque consume más del 30% del oxígeno del cuerpo y recibe el 25%  de la sangre que el Corazón bombea ( lo cual es muy inconcebible, considerando que el cerebro solo constituye el 2.4% del peso humano en una persona promedio ).

Si todas estas habilidades del cerebro no nos impresionan, consideremos que él funciona como el galeno para el resto del Cuerpo. Produce más de 70 fármacos, desde analgésicos ( como la endofina ) hasta antidepresivos  (como la Serotonina ).

El cerebro es responsable de la cognición, las emociones y la memoria. Nuevos estudios han sugerido que algunas de las características básicas del cerebro, especialmente funciones vinculadas con el aprendizaje, se acercan a niveles adultos entre los 11 y 12 años de edad. El desempeño en esa variedad de tareas cognitivas como las que acabamos de señalar y otras como la de el vocabulario, el reconocimiento espacial, el razonamiento y la capacidad de hacer cálculos mejoran rápidamente entre los 6 y los 10 años, pero luego se nivelan. El desarrollo del cerebro parece concluir antes de los 12 años, el cerebro del adolescente sigue creciendo. Además los expertos han dicho que los adolescentes no utilizan a plena capacidad la parte del cerebro que se encarga de considerar los sentimientos de otras personas. Al parecer, las redes neuronales que apoyan la toma de decisiones maduran de manera lenta, lo cual explicaría lo que se conoce como ‘típica actitud’ de las personas en tránsito entre la niñez ( 10 y 17 años) y la edad adulta juvenil ( 18 y 40 años). Y a pesar de todo la capacidad de procesamiento y almacenamiento de un cerebro humano estandar supera aun a los mejores computadores de hoy en día. Es como el Alma de la persona humana que supera  toda explicacion científica y espiritual.

“Yo veo siempre al alma humana como posando sobre el corazón, de donde parten infinidad de hilos o líneas a la cabeza ( al cerebro)”., Cf. “Visiones y Revelaciones”, de S.Ana Catalina Emmerick, Tomo Tercero, Libro II y VIII, Época Octava, Capítulo X, Pág., 431. Ella es el principio distinto de la materia, mediante el cual vivimos, sentimos y entendemos. El alma humana tiene tres propiedades fundamentales, a saber: es espiritual, libre e inmortal. El conocimiento racional, la volición, el lenguaje, el progreso, la religiosidad, la moralidad y el sentimiento artístico prueban con evidencia que hay en la persona humana un principio racional, capaz de ejercitar estas operaciones, de que el bruto carece. “Estaba tendida envuelta en un vestido largo. Jesús la levantó fácilmente contra su pecho para soplarle en el rostro. Vi entonces una cosa admirable. Junto al cadáver había una forma luminosa, en un círculo brillante, la cual, no bien Jesús sopló sobre ella, entró por su boca como una figura humana luminosa. Jesús depositó de nuevo el cadáver sobre su lecho y tomándole de la mano le dijo: ¡Niña, levántate!. Ella se levantó y se sentó en el lecho”., Cf. “Visiones y Revelaciones”, de S.Ana Catalina Emmerick, Capítulo IX, Tomo Tercero, Libro I  y VII, Pág., 115.

Tiene, pues, el hombre un alma espiritual y un cerebro prodigioso creados por Dios, Uno y Trino; y confundirlos con el  ánima y el cerebro  del bruto es un absurdo incalificable. Pasa aquí también que el materialismo, por ir en pos de sus prejuicios, niega las cosas más evidentes y se abraza a los mayores absurdos y orgullos. Entendemos por lenguaje cualquier medio de que se valga la persona humana para expresar sus ideas, juicios y raciocinios. Este medio (‘activado por uno o varios genes creados y puestos por Dios Creador’) puede ser oral, escrito o por señas (Cf.  Jeremías 1: 4- 19 ). El animal podrá expresar algunas sensaciones, p.e. el hambre, el temor, la alegría, etc., Pero jamás ‘ideas o nociones abstractas’. Y no es porque le falte la facultad de articular sonidos, como vemos en los loros, sino porque no tiene inteligencia. Además, el animal se expresará por medio de gritos o gestos naturales; pero nunca podrá recurrir al lenguaje convencional como el hebreo; jamás podrá darle a un signo tal o cual significación arbitraria como el chino, lo que es propio de la inteligencia. Por eso jamás el animal podrá escribir, porque la escritura está siempre hecha a base de signos arbitrarios.

Según un estudio publicado en el año de 1999 por la prestigiosa revista británica “Nature” , realizado por el Dr.Kourosh Saberi, y su colega David Perrot, de la Universidad de California, Estados Unidos, ‘la capacidad del cerebro humano para comprender y procesar un discurso invertido es incomparable a la de cualquier máquina procesadora de datos. El cerebro obvia las imperfecciones. Escuchar segmentos de palabras grabadas del Toráh hacia atrás a 50 milisegundos de velocidad, no afecta su comprensión. El discurso es un estímulo multidimensional cuántico’.

En paralelo, la  revista “New Scientist” presentó una investigación coincidente, firmada por el Lic. Graham Rawlinson. En ese trabajo interdisciplinar, Rawlinson recuerda que, en el año de 1976, en la Universidad de Nottingham-Inglaterra, se realizaron una serie de pruebas que demostraron que la alteración del orden de las letras de las palabras de un texto ( como el del Torah ) no afectan la capacidad de las personas y menos la de un computador bien configurado -para poderlo entender- en toda su estructura:

“Un etsduio de uan uivenrsdiad, no ipmotra el odren en que lsa ltears etsan ersciats, la uicna csoa ipormtnate es que la pmrirea y la utlima ltera estne ecsritas en la psiocion cocrrtea. El rsteo peuden estra ttaolmntee mal y aun pordas lerelo sin pobrleams. Etso es pquore no lemeos cdaa ltera por si msima snio la paalbra cmoo un tdoo. Pesornamelnte me preace icrneilbe lo anteroir preo el gne dle lengauje atcua de esa maenra pro volnutda Diivan”.   

Como vemos para evitar los problemas de lectura, basta conservar la primera y la última letra de cada palabra en el texto, tabla o tablilla. El cerebro creado por Dios ( Cf. Sabiduría 6: 15-21 ) puede entender todo si no cambian la ‘pmrirea’ y la ‘útlima ltera’, además no tener en cuenta otros dos factores: no modificar la extensión de las palabras y tener cierta idea sobre lo que se está leyendo.

“Las lenguas son como cifras que en lugar de cambiarse  las letras por letras, se cambian las palabras por palabras; de modo que una lengua desconocida es descifrable”., Cf. Blas Pascal, Pensamientos,  # 27, Pág.,178.

“Esto nos permite reconocer plenamente los dones preciosos recibidos del Creador: el valor del propio cuerpo, el don de la razón, la libertad y la conciencia”., Cfr. Ss. Benedicto XVI, Exhortación Apostólica Postsinodal, Verbum Domini, la Creación del hombre, # 9, Pág., 24.

Pero, ¿ya han descubierto el gen o genes del lenguaje?  Podría decirse que este siglo ha sido el tiempo de la genética. Después de la decodificación del genoma humano, no han cesado de producirse descubrimientos más o menos resonantes que involucren el conocimiento de las piezas fundamentales de los organismos vivos. Pero la Sagrada Escritura ya hace mención de dichos temas. Veamos:

“La sabiduría protegió al hombre que fue creado primero, al padre del género humano, después de ser formado solo, y ella lo levantó de su caída y le dio el poder de dominarlo todo”., Cf. Sabiduría 10: 1-2.

 En Octubre de 2001, un equipo encabezado por los investigadores Lic. Cecilia S.L. Lai y Simón E. Fisher, identificó un ‘gen’ concreto en el cromosoma 7, que producía en los miembros de una familia serias dificultades lingüisticas traducidas en problemas graves para construir frases y entenderlas, es decir, para aplicar la lógica del lenguaje. Las personas investigadas, sin embargo, no eran inferiores en inteligencia general a las personas normales.

Por lo tanto, el lenguaje en la persona humana parece ser una cosa diferente e independiente de lo que se considera la inteligencia general, que es medida por los psicólogos por medio de pruebas. En contraste con lo anterior para hablar correctamente, los niños normales  poseen una asombroza destreza para manejar el idioma materno. De una manera inconsciente parecen tener muy clara la estructura interna del idioma. Otras destrezas como la matemática, las adquieren los niños mucho más tarde y con mucho más esfuerzo. Hablar es algo natural en los niños; multiplicar no.


“Dios habla en la Escritura por medio de hombres y en lenguaje humano”., Cf. San Agustín, De Civ. Dei XVII 6,2: PL 41,537; CSEL 40,2,228.

 

El lingüista (Ver Imagen) el Lic. Noam Chomsky ( 1928 ) llegó hace años a la convicción de que, efectivamente, los niños vienen al mundo con estructuras neuronales que los capacitan para aprender un idioma: en cierto modo, disponen de un ‘órgano para el lenguaje’. Debe haber algo común, un conjunto de reglas, en todas las lenguas a pesar de su enorme diversidad; por eso es posible la traducción de un idioma al otro. Esa base común, sería innata ( Cf. Génesis 11:1-9;  Hechos 2:1- 42).

Pues bien. El ‘gen’ anómalo que presentaba la familia investigada sólo se diferencia de su forma normal en una base de la cadena de nucleótidos (adenina en lugar de guanina ) en una sola hebra de la doble hélice del ADN. Ese cambio modifica un solo aminoácido en la cadena de la proteína para la que codifica el  gen. El resultado de una variación tan minúscula en una molécula es sorprendente: ¡Un grave problema lingüistico!

¿Puede o no puede deducirse a partir de este descubrimiento y otros que existe un gen o varios genes para el lenguaje? Investigadores en Gran Bretaña entre el año de 2004 y el 2005 identificaron un ‘gen’  asociado  al habla y al lenguaje, lo que sugiere que nuestra propensión al balbuceo y al parloteo es ‘algo innato’ porque Dios lo ha querido así y que nuestras capacidades lingüísticas al menos son debidas a la fisiología nuestra ‘imagen y semejanza del Creador’( Cf. Génesis 1:26 ). El ‘gen del lenguaje’ ( Simbolización del Cerebro ) actua por voluntad divina durante el desarrollo embrionario en la formación de regiones cerebrales asociadas al lenguaje y al habla. El gen, llamado ‘foxp2’, fue identificado mediante estudios sobre desordenes lingüistícos y del habla severos. Es una muestra única de varias discapacidades lingüistícas iguales a las de Moisés y motoras como las de algunas personas.

Además entre los años 2008 y 2009 una aplicación de una técnica de registro de imágenes cerebrales realizada por investigadores de la Escuela de Medicina San Diego, de la Universidad de California (UCSD), reveló importantes secretos sobre la actividad neuronal que posibilita la capacidad del lenguaje en los humanos. Gracias a ella, se han podido registrar los procesos de la llamada área de Broca, mientras un grupo de pacientes hablaba y leía. Los registros han establecido que dicha área resulta clave para el lenguaje, puesto que es capaz de procesar la gramática, el léxico y la fonética en tan sólo unos milisegundos. Todos estos descubrimientos suponen un considerable avance en la comprensión de los procesos cognitivos complejos en el Cerebro humano, y deja obsoletos diversos modelos explicativos anteriores.
  

( Registros neuronales directos han revelado que tres aspectos fundamentales y diversos del lenguaje son registrados en esta y bastante pequeña región del cerebro o Área de Broca y en un breve periodo de tiempo. Fuente: Ned T. Sahin, PhD UCSD.).

“Vosotros no podéis vivir solos, sin Dios que os ha creado a su Imagen. Vosotros erais a Mi Semejanza, buenos y perfectos en todo. Esta es una gran verdad que ha sido deformada en el curso de los siglos: Yo quiero restablecer esta verdad Divina. Dios puede cambiar el aspecto de las cosas, pero no puede cambiar Su Plan Divino; y vosotros formáis parte de su Plan que está en cada uno de ustedes, como una Ley Escrita por su Santa Mano. Vosotros os habéis vuelto imperfectos sin la Gracia de Dios. Vosotros debéis haceros perfectos por la Gracia de Dios”., Cf. ‘Testigos de la Cruz’, Mensajes de vida – Extractos- Volumen 2, J.N.S.R., Jueves 2 de Septiembre de 1993, Pág., 29.

En tiempos de Moisés Dios desde su Eterno Presente le habló a él varias veces  y le dio el ‘poder de la palabra’ para nombrar todo lo creado y que está en el Torá; pues su persona tenía serios problemas para hablar y hacerse entender de todo el Pueblo de Israel:

“¡Ay, Señor! – respondió Moisés-. Yo no tengo facilidad de palabra, y esto no es sólo de ayer ni de ahora que estás hablando con este siervo tuyo, sino de tiempo atrás. Siempre que hablo, se me traba la lengua. Pero el Señor le contestó:-¿Y quién le ha dado la boca al hombre? ¿Quién si no yo lo hace mudo, sordo, ciego, o que pueda ver? Así que, anda, que Yo estaré contigo cuando hables, y te enseñaré lo que debes decir. Moisés insistió: ¡Ay, Señor, por favor, envía a alguna otra persona! Entonces el Señor se enojó con Moisés, y le dijo: -¡Pues ahí está tu hermano Aarón, el levita! Yo sé que él habla muy bien. Además el viene a tu encuentro, y se va a alegrar mucho de verte. Habla con él, y explícale todo lo que tiene que decir; Yo, por mi parte, estaré con él y contigo cuando hablen, y les daré instrucciones de lo que deben hacer. Tú le hablarás a Aarón como si fuera Yo mismo, y Aarón a su vez le comunicará al pueblo lo que le digas tú. Llévate este baston porque con él harás cosas asombrosas”., Cf. Éxodo 4:10-17.

Además él Señor le daría a Moisés dos Tablas y al Pueblo Hebreo unos Sellos codificados y comprimidos que serían transcritos en millones de tablillas, cada una conteniendo las 22 letras de la lengua Hebrea, que agrupadas por grupos cuánticos y combinadas en orden y en desorden como puntos cuánticos, mostrarían toda la historia de la creación misma en el futuro.  Como ejemplo recordemos las 202 partes principales del cuerpo humano desde el Anulo inguinal profundo hasta la vesícula seminal. Todas creadas por Dios, Uno y trino.  
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Los puntos cuánticos (qdots o quantum dots en inglés) o átomos son nano estructuras creadas en el laboratorio que miden millonésimas de milímetro —nanómetros—. Inventadas hace unas décadas, tienen un sinfín de aplicaciones en áreas tan variadas como las telecomunicaciones, la computación cuántica, la seguridad o la biomedicina. En el mundo macroscópico, los puntos cuánticos pueden tener el aspecto de una simple pastilla plana, o estar disueltos en un líquido. Nadie sospecharía que esa sustancia ha sido construida en el laboratorio partiendo de unos pocos átomos, con técnicas que manipulan la materia a escalas de nanómetros. A esas dimensiones el material se convierte en una matriz sobre la que han crecido estructuras, como pirámides o montañas, formadas por unos pocos cientos o miles de átomos. Esas estructuras son los puntos cuánticos.
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"Y el ángel que iba conmigo me dijo: 'Aquellos llevan a los justos las medidas de los justos y las cuerdas de los justos para que ellos se apoyen sobre el Nombre del Señor de los espíritus por los siglos de los siglos"., Profeta Henoch 61, 3.
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En nuestro caso son las letras hebreas o números que como puntos cuánticos son nano estructuras creadas dentro del mismo software bíblico. Estas letras cuánticas pueden tener el aspecto de una simple figura plana, o estar regadas en una Sopa de Letras Cuántica o tablilla sagrada que ha sido construida partiendo de la misma Tora con manifestaciones naturales o sobrenaturales (Atajos con sus singularidades espacio-temporales en medio de cuerdas cósmicas donde se puede viajar al pasado, o puede haber incluso singularidades que son más especiales donde se puede viajar a otros universos paralelos o curvas temporales cerradas ) que influyen cada proceso del software bíblico a escalas de nanómetros o de nano centímetros o nano espacios o nano viajes en el tiempo. A esas dimensiones también el material de cada tablilla cuántica se convierte en una o varias matrices sobre la que han crecido estructuras perfectas, formadas por unas pocas letras o miles de ellas.
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Lo especial es que, en las tablillas, las letras o números están obligadas a permanecer atrapados, confinadas en las tres dimensiones y eso genera curiosos y reales fenómenos cuánticos. En concreto, las 22 letras se disponen en el punto como en una única figura, de ahí el apodo en occidente (más no para el pueblo Hebreo ) de letras o números artificiales. Y de ahí, también, el que las tablillas estructuradas en letras o números cuánticos tengan propiedades que pueden ser controladas a voluntad por el Software. Una de ellas es que, al ser iluminados con diferentes colores los espacios de las letras encontradas, las letras cuánticas sagradas de esos espacios reemiten luz en una longitud de onda muy específica. Cuanto más pequeños sean los espacios, menor es la longitud de onda y más acusadas las propiedades cuánticas de la luz que emiten. El resultado es que el software bíblico puede diseñar de antemano un espacio cuántico para la longitud de onda que deseemos o que deseé Dios mismo.
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 “El Señor me dio entonces las dos tablas de piedra, escritas por él mismo, que contenían todas las palabras que Él había dicho en el Monte, de en medio del fuego, el día en que todos nos reunimos”., Cf. Deuteronomio 9:10.

“Yo soy Rafael... Den gracias ahora al Señor de la tierra, alaben a Dios. Yo voy a subir a Dios que me envióPongan por escrito todo lo que les ha sucedido”., Cf. Tobit 12:15ª 20c.
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“Y me dijo: Mira, Henoc, las tablillas del cielo, y lee eso que ahí está escrito, y comprenderás todo distintamente. Y miré las tablillas del cielo y leí todo lo que estaba escrito y lo comprendí todo, y leí el libro de todas las obras de los hombres y de todos los hijos de la carne, que están sobre la tierra hasta las generaciones eternas”., Cf. La Biblia Apócrifa, El Libro de Henoc, Capítulo LXXXI:I-II.Ver Imagen.
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"Después Henoch enseñó y él se puso a hablar según los libros: Y Henoch dijo: 'A propósito de los hijos de justicia, a propósito de los elegidos del mundo y a propósito de la planta de equidad he aquí lo que os diré y os daré a conocer, hijos míos, Yo Henoch, según me ha sido revelado por una visión de los cielos, y según lo he aprendido por la voz de los santos ángeles, y lo he comprendido por las tablillas del Cielo. Henoch comenzó pues hablar según los escritos"., Cf. Ob. Cit. 93, 1-3a.
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“Si los hijos de Israel se entregan a la impureza se les inscribirá como adversarios en las tablillas del cielo y serán suprimidos del libro de la vida”., Cf. La Biblia Apócrifa, El Libro de los Jubileos, Capítulo XXX:XVIIIe.

Grupos de palabras y de cifras númericas cuánticas que conforman a su vez algunos códigos,  que ayudan a descubrir o a definir las leyes espirituales y físicas de la vida y de todo el universo manifestado visible e invisible.

“Verdaderamente el Señor nuestro Dios nos ha mostrado su gloria y su poder, y hemos oído su Voz, que salía de en medio del fuego. Hoy hemos comprobado que Dios puede hablar con los hombres sin que éstos mueran”., Cfr. Deuteronomio 5: 24.   

Estás afirmaciones podrían resultar extrañas para algunos cristianos católicos, especialmente para los más tradicionalistas, pero esta sabiduría de todos los siglos, contenida en el Torá, es la esencia de unos códigos guardados por siglos y que cada día ganan más investigadores bíblicos con sus diferentes adeptos.


  


“Ana ( La santa y señora madre de María Santísima ) dió gracias a Dios y volvió a su casa contenta. Cuando después de mucho orar en su lecho, se quedó dormida, he visto aparecer sobre ella un resplandor que la penetraba. La he visto avisada por una inspiración interior, despertar e incorporarse en su lecho. En ese momento vi un rostro luminoso junto a ella, que escribía con grandes letras hebreas ( Cf. Gálatas 6:11) a la derecha de su cama. He conocido el contenido de la frase, palabra por palabra. Expresaba en resumen, que ella debía concebir; que su fruto sería único, y que la fuente de esa concepción era la bendición que había recibido Abrahán. La he visto indecisa pensando como le comunicaría esto a Joaquín ( Su esposo y señor padre de María Santísima );  pero se consoló cuando el ángel  le reveló la visión de Joaquín. Tuve entonces la explicación  de la Inmaculada Concepción de María y supe que en el Arca de la Alianza había estado oculto un sacramento de la Encarnación, de la Inmaculada Concepción, un misterio de la Redención de la humanidad caída. He visto a Ana leer con admiración y temor las letras de oro y rojas brillantes de la escritura, y su gozo fue tan grande que pareció rejuvenecer cuando se levantó para dirigirse a Jerusalén. He visto, en el instante en que el ángel se acercó a ella, un resplandor bajo el corazón de Ana, y allí, un vaso iluminado. No puedo explicarlo de otro modo sino diciendo: había allí como una cuna, un tabernáculo cerrado que ahora se abría para recibir algo santísimo. No puedo expresar cómo he visto esto maravillosamente. Lo vi como si fuera la cuna de toda la humanidad renacida y redimida; lo vi como un vaso sagrado abierto, al cual se le quita el velo. Reconocí esto con toda naturalidad. Este conocimiento era a la vez natural y celestial. Ana tenía entonces, según creo, cuarenta y tres años ( 4 + 3 = 7 = La Plenitud en Dios )”., Cf. “Visiones y Revelaciones”, de S.Ana Catalina Emmerick, Tomo II, Libro I y IV, Capítulo IV, Págs. 123 y 124 (1820). 


“Jesús habló mucho con Eliud de la santidad de Joaquín y de Ana y de la concepción sobrenatural de María bajo la Puerta Dorada de Jerusalén. Le declaró que Él no es nacido de José, sino que, según la carne, lo es de María Virgen, y que Ésta fue concebida de aquel germen puro que se le quitó a Adán antes de caer en la culpa, germen que llegó a través de Abrahán, de José en Egipto, y, por medio de éste, al Arca de la Alianza y desde allí a Joaquín y a Ana. Jesús le declaró que para salvar a los hombres había aparecido Él en toda la flaqueza propia del hombre, sintiendo y probando todo como hombre, y que sería elevado como la serpiente de Moisés en el desierto, sobre el monte Calvario, donde el cuerpo del primer hombre había sido sepultado. Le declaró lo que debía padecer y cómo serían de ingratos los hombres para con su Redentor. Eliud preguntó a Jesús dónde estaría su reino, Jesús le contestó que donde Él estaba, estaba también su reino”., Cf. Visiones y Revelaciones completas, B. Sor Ana Catalina Emmerick, Tomo II, Libro II y V, Cap., XVI, Pág., 363.

El Torá o el Pentateuco ( de penta, y el gr. Teokos, volumen ), es el nombre de los cinco primeros libros canónicos de la Biblia: Génesis, Éxodo, Levítico, Números y Deuteronomio. Son los textos que sirven de base al Antiguo Testamento y del código secreto bíblico con sus sellos: los masoréticos libres y escondidos.

Se llaman así porque son los mas antiguos conservados, transmitidos y autorizados por los eruditos bíblicos judíos llamados masoretas. El texto masorético utilizado en la presente primera emisión de ‘Todo lo dice su Nombre’ es el de la Biblia Hebraica ( en su 3ª. Edición, 1937 ), editado por Rudolf Kittel, y cuando estuvo ya disponible, el de la Biblia ‘Hebraica Stuttgartensia’. Y ha sido el mismo que se utilizó de forma literal, en la película: “El Evangelio Según San Juan” del director Philip Saville y protagonizada por Henry Ian Cusick, en el año de 2003.

“Cuando Jesús cumplió los 12 años, sus padres subieron con él a Jerusalén, para la fiesta. Y, ésta terminada regresaron a su hogar. Más Jesús se separó de ellos, y quedó en el Templo, entre los pontífices, los ancianos del pueblo y los doctores de Israel, preguntándoles y respondiéndoles sobre puntos de doctrina ( Cf. San Lucas 2:46 ). Y todos se admiraban de las palabras, inspiradas por la gracia, que salían de su boca. Y el más viejo de los doctores repuso:¿Has leído los libros Santos? Y Jesús dijo: “Los libros, el contenido de los libros y la explicación de los libros, de la Thora, de los Mandamientos, de las Leyes y de los Misterios contenidos en las obras de los Profetas, cosas inaccesibles a la razón”. Y el doctor dijo a sus compañeros: ‘Por mi fe, que hasta el presente no he alcanzado, y ni aun por oídos conozco, un saber semejante’. ¿Qué pensáis que llegará a ser este niño, por cuya boca parece que habla Dios?”., Cf. “El Evangelio Árabe de la Infancia de Jesús”, Capítulo L, Jesús en Medio de los doctores (Extractos/ Apócrifos).

El hebreo se escribía en un principio sólo con las consonantes, y a veces en los manuscritos y en los postes, no se veía claramente la separación entre palabra y palabra; que es lo que pasa con las secuencias de palabras, dentro de los software de los códigos secretos bíblicos.

“Escríbelos también en los postes y en las puertas de tu casa”., Cf. Deuteronomio 6: 9.

Por eso, en algunos casos, las palabras del texto impreso se han dividido de manera distintas,  un ejemplo: por medio de Tablas o se han leído con vocales diferentes.   A veces los masoretas indicaban en el margen que el texto debía leerse, no como estaba escrito, sino de otro modo, así que, en ocasiones, las traducciones sea de forma escrita o incluidas dentro de los programas bíblicos informáticos han seguido esas indicaciones.

En otros casos se ha adoptado una variante o diferencia basada en uno o más manuscritos hebreos o también software bíblicos más organizados, prácticos y rápidos.. Hay casos en que ningún manuscrito o programa hebreo para el PC ofrece en un determinado pasaje un sentido satisfactorio de acuerdo con el contexto de que se trata; en nuestro caso, con la busqueda  de resultados en la  larga hebra o en la larga autopista secuencial de palabras o números hebreos.

Las traducciones pueden seguir a una o más de las versiones antiguas, como la griega (Septuaginta ), la siriaca o la latina  (Vulgata), pero ya no se obtienen todos los mismos resultados esperados exactos de las hebras. 

La Septuaginta en Español, la Biblia de los LXX: Es llamada "La Biblia de los Apóstoles", ya que fue la que utilizó la primera comunidad cristiana y que predomina, aún hoy en todo Oriente. Según una sana tradición (repetida por Filón de Alejandría hasta San Agustín), Ptolomeo Filadelfo solicitó a 70 (ó 72) eruditos judíos que vertieran en griego el Pentateuco, lo cual hicieron, según la historia cada cual, a la perfección. Además parece que San Pablo se sirvió de el Antiguo Testamento Griego en todas sus cartas. 





El canon de los LXX estaba relativamente fijado hacia el primer siglo de nuestra era y es bastante anterior al masorético, es decir, parece que inclusive, al canon hebreo. Inclusive, los helenistas, que muy pronto se convirtieron a la verdadera fe utilizaban abiertamente la versión griega de las Sagradas Escrituras. 





Todo lo anterior fue lo que impulsó a diversas comunidades judías en el Siglo II a pasarse al texto masorético, cuya fijación del canon, desarrollo y corrección fue posterior. La versión que acá les dejamos es la traducción fidedigna del Rvdo. Pbro. Wilhelm Jünemann Beckschäfer. Es considerada la primera traducción completa de las Sagradas Escrituras en Español. Salió de la imprenta en el año de 1928.





El Antiguo Testamento se publicó ese año, pero el Nuevo Testamento no salió a la imprenta hasta el año de 1992. Es ideal para los académicos de las Sagradas Escrituras con un texto literal. 





Esta Santa Biblia es un poco accesible y suele estar a un precio elevado en varias partes del mundo, por ello creemos que conviene tenerla al menos, aunque sea en su versión digital en las memorias de nuestros PC. Para descargar la Biblia Septuaginta, traducida y comprimida, hagan Click a continuación:

Biblia Septuaginta, Versión Especial <CLIC>

Bien, Continuemos. Se deben adoptar unos textos reconstruidos conforme a la opinión que prevalece entre las autoridades bíblicas, y que se identifica en las notas cómo ‘textos probables’. Cuando la traducción se ha apartado del texto hebreo, esto se indica en  notas correspondientes.

“El letrero estaba escrito en hebreo, latín y griego”., Cf. San Juan 19: 20d.

“Cuando se hizo silencio, les habló en hebreo”., Cf. Los Hechos 21:40c.

Por eso, no es raro que toda clase de personas, algunas polémicas, o importantes sabios de las ciencias, hombres de negocios, místicos, milenaristas e inclusive ateos, incredulos o ignorantes se acerquen a estos estudios nuevos del Idioma Hebreo y de los textos codificados de el Torá. Hasta se han atrevido a decir que está es una ciencia nueva con su tegnología de punta para el servicio del alma, cuerpo y mente permanentemente buscando al Creador de Todo. Pero Dios no necesita de computadores y la Toráh no es un libro para técnicos o Adivinos. Es un Libro para el Espíritu de las personas llenas de Dios.

“El Hebreo, aunque aparente otra cosa, no es creación de ser humano alguno, sino que fue concebido en los confines celestiales del tiempo para producir el efecto de la existencia de varios niveles y que pudiera contener toda la historia de la humanidad. Del Principio al fin”., Cf. Con las Palabras de el Abogado, Analista de Sistemas de Computación y Experto en la Torá, Lic. Diego Hernando Alvarez ( Asch, Los Códigos Bíblicos  2005 ).

Podría sorprendernos esto y aún preocuparnos el caso de que alguna palabra hebrea pueda tener un sentido diferente por la traducción y la interpretación de la palabra. Con esto entonces, podremos aceptar las vocales mazoreticas usadas teniendo en cuenta el contexto mismo. Por ejemplo: ¿Cómo escoger la traducción de una palabra como YSHH? Podemos escribir entonces:

YOSHUAH – YESHUAH – YISHUAH – YASHUAH – YAHUSHUAH.

Entonces, la palabra que escojamos nos la va a dar el contexto de lo que  leamos, escribamos o escuchemos, dependiendo del tipo de vocal que usemos. Cada una de las letras del ‘Alfabeto Hebreo’ forman un bello acróstico como lo podemos ver en la Biblia de Jerusalén, en Proverbios 31:10 al 31 comenzando cada línea con una de tales letras. En el Salmo 119 existen 22 parágrafos de 8 versos, un parágrafo por cada letra del alfabeto. Todos los 8 versos de cada parágrafo comienzan con una misma letra. Cada sucesivo parágrafo comienza con la siguiente letra del alfabeto.


   



“Para los elegidos, hasta las oscuridades de la Escritura se cambian en claridades; y todo se torna en mal para los otros, hasta las claridades”., Cf. Blaise Pascal ( 1623 – 1662), Pensamientos, # 6, Capítulo 12, Pág., 53.Ver Imagen.


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